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Queremos ser el colaborador más valioso

«Es una especie de cohete de dos etapas», con estas palabras describe el gestor de cuentas Marco Haasjes el PLC Café: un encuentro periódico que organiza para TMC Automatización Industrial al menos una vez por trimestre desde principios de octubre. «La idea es que el PLC Café sea una plataforma para compartir conocimiento en forma de talleres. También ha de servir para hacer contactos: se conoce gente nueva en un ambiente informal y accesible».

La primera sesión del PLC Café tuvo lugar en TMC hace un par de semanas: «Organizamos un taller para 16 asistentes en colaboración con Sigmatek. Dos representantes de Sigmatek mostraron en una sesión interactiva cómo funcionan sus plataformas. Hablaron sobre las nuevas tecnologías que están utilizando y sobre las últimas innovaciones en el campo de la programación basada en objetos. Tras la presentación se abrió el turno de preguntas. Y concluimos con la obligada ronda de bebidas. Después fuimos a picar algo juntos. ¡Lo normal en TMC, supongo!», comenta Marco riendo. «Primero el trabajo; los placeres de la vida, poco después».

Se entregó un certificado a todos los participantes. «La formación especializada en un tema importante del sector siempre queda bien en el currículum. Demuestra que tu conocimiento no es superficial, que te has zambullido en un tema clave mediante un curso intensivo».

Marco destaca el valor de una base amplia de conocimientos: «Los talleres en el PLC Café son gratuitos para cualquier persona relacionada con TMC: clientes, candidatos, Employeneurs de cualquier segmento... Duran unas dos horas, con un máximo de 15 participantes. El campo que se abre con esos dos parámetros es enorme. Se trata de inspirarnos continuamente los unos a los otros para aportar más valor a los clientes, facilitar a los Employeneurs un comienzo brillante en nuevos proyectos y mostrar a los candidatos lo que TMC –y Automatización Industrial– significa.

El 1 de enero, Automatización Industrial se convirtió en un segmento independiente. Para Marco, es la culminación de más de tres años de trabajo. «Ahora solo queda cerrar los últimos flecos», señala. «Estamos deseando poner los motores a toda máquina, y tenemos ambiciones propias. Nuestra meta no es ser el colaborador de mayor tamaño, sino el más valioso. Las iniciativas como el PLC Café nos ayudan en este camino y, además, están en perfecta sintonía con nuestros objetivos: se trata de una iniciativa de los Employeneurs, y juntos conseguiremos que sea todo un éxito».


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