La industria aeronáutica persigue constantemente el desarrollo de nuevas técnicas para reducir el consumo de combustible y los costes, a fin de satisfacer los requisitos medioambientales y mantener su rentabilidad. Por una parte, la industria utiliza materiales con una mayor resistencia y un menor peso. Por otra parte, las nuevas técnicas y los procesos de fabricación deben reducir los costes de producción totales. Adicionalmente, la industria trata de resolver los retrasos en los pedidos generados por la creciente demanda del mercado.

La industria alimentaria debe producir más comida que nunca para responder al crecimiento de la población mundial. Así como ofrecer alimentos variados: proteína de alta calidad y productos más saludables y sostenibles. Al mismo tiempo, la industria es responsable de su impacto en el medioambiente, el clima y la biodiversidad por kilogramo de comida en todo el mundo. Los sistemas de producción han de ser climáticamente neutros, sostenibles y resistentes. Esto exige un procesamiento eficiente y continua innovación.

Ante el crecimiento y el envejecimiento de la población, el sector de las ciencias de la vida y la atención sanitaria necesita evolucionar para ofrecer mejores resultados en el cuidado y la experiencia de los pacientes por un coste significativamente menor. Para ello, las empresas están adoptando tecnologías emergentes, como la biotecnología, y desarrollando sistemas inteligentes de atención sanitaria. Estos avances deben satisfacer requisitos elevados en términos regulatorios y de calidad. Así como demostrar su valor añadido.

El sector de la construcción es uno de los sectores económicos de mayores dimensiones. Los proyectos son cada vez más grandes, más complejos y más arriesgados. Los presupuestos se encuentran siempre bajo presión, en todo el mundo. Esto limita los recursos disponibles. Por lo tanto, las prioridades más importantes actualmente son la conclusión de los proyectos en plazo, con el presupuesto acordado y de un modo más eficiente. Las empresas líderes del sector confían en el uso de materiales y técnicas de construcción avanzados, la implementación de operaciones más eficientes en obra y la aplicación de tecnologías inteligentes al tiempo que equilibran la innovación con la seguridad y los riesgos.

Los recursos energéticos mundiales están cambiando. La presión social y medioambiental aumenta la necesidad de sustituir los combustibles fósiles por fuentes de energía renovable. Las organizaciones deben hacer frente a los retos y oportunidades que conlleva innovar en la industria energética y encontrar formas más sostenibles de producir, procesar y distribuir la energía.

La industria de defensa, incluida la (aero)espacial, representa un sector enorme y complejo que atiende tanto las necesidades militares como las comerciales. Debe lidiar con distintas fuerzas disruptivas, desde transformaciones del mercado hasta innovaciones tecnológicas o conflictos geopolíticos. Los problemas de seguridad y las dificultades de comercialización y financiación afectan a la industria y la obligan a evolucionar continuamente. Para mantener el ritmo de los nuevos competidores, las empresas del sector han de centrarse en la innovación.

La industria ferroviaria y del transporte desempeña un papel fundamental en la economía de muchos países. Consiste principalmente en el envío de mercancías y el servicio de pasajeros. Las tendencias actuales, como la movilidad conectada y el transporte ecológico, plantean una serie de desafíos y oportunidades para esta industria. Como en cualquier otro sector, las cuestiones medioambientales exigen el desarrollo de alternativas rentables, eficientes energéticamente y libres de emisiones. Por tanto, la innovación tecnológica y en los servicios de pasajeros resulta esencial.

La industria automovilística es uno de los sectores con mayor volumen de facturación en el mundo. Los retos asociados a la innovación, como la conducción autónoma, están remodelando la industria. Además, ha de hacer frente a las crecientes exigencias de seguridad y a las normativas medioambientales. Su rendimiento afecta asimismo a otros sectores importantes, como el transporte, el petróleo y la alimentación. Por lo tanto, mantenerse en cabeza es una necesidad para las empresas en esta industria.

Con un amplio espectro de actividades, desde la construcción naval a la pesca, el transporte global o la producción de energía en alta mar, la industria marítima y offshore desempeña un papel importante en la economía mundial. La sostenibilidad y la mejora del rendimiento son factores primordiales en este campo. A medida que las estructuras aumentan de tamaño y complejidad, los requisitos funcionales son cada vez mayores y las normativas de emisiones, cada vez más estrictas. Para satisfacer las necesidades alimentarias y medioambientales del planeta, el desarrollo de tecnologías más seguras, más limpias, ecológicas y eficientes se torna una cuestión vital.

La industria química y de procesos está integrada por 25 multinacionales y un gran número de empresas de menor tamaño. Su impacto es enorme. Por ello, esta industria se centra en los denominados grandes retos sociales: salud, alimentación, energía, transporte y clima. Para afrontar estos retos, los ingenieros químicos contribuyen a un número ingente de procesos y productos, desde combustibles y alimentos hasta superfibras artificiales y edulcorantes bajos en calorías.

La fuerza motriz en el sector de los servicios financieros y de seguros es el análisis de datos. Las empresas confían en él para la toma de decisiones y la búsqueda de ventajas competitivas. Aunque la tecnología financiera abre un gran número de oportunidades, la dificultad estriba en mantener los requisitos regulatorios, la protección de la privacidad y la ciberseguridad. Este sector siempre debe garantizar el cumplimiento de las normativas.

La industria de la maquinaria y los sistemas de alta tecnología se integra en muchos otros campos, como el de energía y renovables y el de ciencias de la vida y atención sanitaria. Por lo tanto, se trata de un sector esencial para un desarrollo sostenible con garantías de futuro. Mediante productos y servicios con un alto valor añadido, contribuye a diversas áreas especializadas: sistemas integrados, manufactura avanzada, microelectrónica, materiales inteligentes y nanotecnología.

El sector de las telecomunicaciones es esencial para el crecimiento y la innovación de numerosas industrias. Desempeña un papel fundamental en el desarrollo de nuevas tecnologías para el internet de las cosas, los vehículos autónomos y los dispositivos móviles. Los continuos avances en los servicios móviles de alta velocidad y la conectividad entre dispositivos impulsan la innovación y la competencia. Adoptar nuevas tecnologías digitales en etapas tempranas, tanto en los servicios como la administración, es imprescindible para mantenerse al día.